miércoles, octubre 17

la suerte de no tener suerte

un día, van a dejar de mirarme. voy a perder todas las oportunidades y seré feliz. tendré un trabajo miserable como todo el mundo, quizá hasta codicie una casa en provincia y jubilaciones. tal vez ansíe tener un perro, una esposa y tres hijos. querré un auto para ir a la feria de chapultepec los domingos. pero habré gastado todos los cartuchos y jamás por mis manos alguna AFORE pasará cierto afortunado día.
y recordaré entonces que cuando las oportunidades se me presentaban el asco me obligaba a rechazarlas, y que los sueños prefabricados me parecían demasiado caros como para pasar una sola noche junto a ellos.