lunes, agosto 31

disculpas

nótese cómo fui dando el borrachazo. disculpas a los afectados. disculpas a mí mismo por exponerme de esa manera ridícula. pero no borro las entradas para que queden como constancia de la malacopez.

domingo, agosto 30

el consumismo

qué puedo yo decir.
de qué ha servido la separación de la nueva españa.
qué sabes de eso, aunque sea un compendio de estupideces, compañro del sur.
qué vamos a hacer.
nada.
lo dicho, dicho esá.
un abrazo.
ariba ls indicatos.
hace mucho tiempo mis cuates (amigos)me acompañaban por cigarros. ya no lo hacen. supongo que no les interesa, o no pueden.

si acaso tuviera la vida comprada
un futuo no escrito
sobre el dintel de la nada
entonces dijera
su mente no está sana
pues no sabe qué le espera
qué le espera del mañana.

todo el día a la muerte de amiga, sin que se digne a decirme qué cartas jugar.
sucio.

cómo extraño los tiempos pasados, cuando yo era implacable.

una y otra vez

no le temo a las repeticiones, pero no hay nada más qué repetir.
"y como hoja seca, que vaga en el viento, vuelo imaginario sobre historias de concreto".
se me han ocurrido un montón de cosas. cada vez que veo la nota roja del gráfico o de la prensa me asombro, y también me indigno. las mujeres del gráfico deberían recibir una paga estupenda. no se pueden hacer las cosas gratis, y menos para esos hijos de puta. la mujer gráfico debería incendiar las instalaciones del museo. las mujeres son capaces de incenciar cualquier cosa. están locas. quizá más que yo.
en fin...

sábado, agosto 15

derrota

yo sé que no soy interesante. aunque soy menos fastidioso leído, no tengo nada qué decir. ojalá que no hubiera perdido tanto tiempo pensando en las estrategias de los otros.
cuando me di cuenta, ya era demasiado tarde. o no, porque sólo me interesaba en cosas que casi siempre aburren. ahora ya ni eso tengo. si no fuera porque, en la convivencia con algunos pocos, que tanto me agrada, tengo que sacar algún asunto pegajoso, sería tan feliz...
no bailo.
no hablo.
sólo me siento a beber, a fumar, a ver qué pasa, a cumplir con lo que me toca.
me habría gustado seguirle la pista a los escritores famosos, a los que, a veces, leo. sin embargo, siempre pensé que había primero qué leer a los grandes, y los grandes nunca se acaban, ya los ha leído todo el mundo.
soy incapaz de dar algo.
ojalá pudiera.
ojalá que no se me hubiera secado el cerebro.
ojalá que mis recomendaciones fueran útiles para alguien.
ojalá que no me hubiera muerto.
ahora, sólo me queda esperar la descomposición, el olor a podrido, las moscas.
ahora, sólo me queda la esperanza de que me aguanten.
ahora, sólo puedo leer a los gigantes, a los más aburridos que yo.
perdóname, cervantes, por no haber seguido tu ejemplo. por no leer novela negra ni libros de caballerías. por haberme adelantado al cansacio, que debía llegarme dentro de diez o veinte años, pero que me llegó hace cinco.
ahora que me empeño en otros autores, su recuerdo no me dura ni cinco minutos.
estoy seco.
he fracasado.

martes, agosto 11

última entrada de una serie de cuatro

ojalá que no me exilien por lengualarga.

los mejicanos

una entrada lleva a la otra.
y es que, pensando en la sensibilidad de los mexicanos, recordé que, el otro día, alguien preguntó en un foro algo acerca de un asunto "mejicano". entonces, otros mexicanos, sensibles e idiotas como suelen ser, rompieron en llanto porque un extranjero había usado una 'j' y no una 'x'. los imaginé de inmediato en busca de un pirata cibernético para corregir y castigar aquel horrible crimen.
habrá qué recordar, entre otras cosas, que el mexicano sólo sabe escribir "méxico", sus derivados y "chinga tu madre" de la forma más adecuada si se consideran las normas. la ortografía y la gramática de los mexicanos son pésimas, a pesar de que todos son herederos de alfonso reyes. desde el cielo, la región más transparente está llena de pájaros nalgones. ya los quiero yo ver escribiendo "china" o "pekín" con caracteres de aquellos lugares, porque los chinos han de pensar que ésa es la forma adecuada. ya los quiero ver pronunciando bien "the united states of america". bola de payasos.
pero lo que más me caga es que yo soy mexicano, y al rato me van a venir por eso. que si yo soy europeísta, malinchista, proyanqui o cualquier otra pendejada. como vienen en bola y de bajada, nos quieren llevar a todos entre las patas, y lo peor es que nos llevan. ni en los periódicos más prestigiosos he visto una redacción impecable. chingao.
ya no sé si desear que en el futuro se descubra que no toda la humanidad es así, para tener esperanza, o no, para que el país no quede en ridículo.

contrarréplica anticipada

inmediatamente después de que subí la entrada anterior, imaginé que alguien me iba a dejar un comentario más o menos de esta naturaleza: "¿y qué importa si el mundo deja de hablarte?" lo curioso es que los tipos duros ni siquiera piensan en eso porque no les interesa. a mí me interesa el asunto porque entre más duros son esos tipos, el mundo más se interesa en incluirlos. aun me parece un mecanismo maquiavélico. he llegado a pensar que es una forma de coquetería. sabina y los tipos duros son una bola de amantes del mundo que se hacen los interesantes.
yo no quiero, en realidad, que el mundo me siga. lo que no quiero es que se enoje conmigo. y es que vivo sobre él. por más que quiera hacerme el desinteresado, el autosuficiente o lo que sea, yo vivo sobre el mundo. no puedo vivir en otro lado, y le saco al más allá. lo mejor es estar en paz y hacerle la barba al jodido mundo para que se esté contento y satisfecho.
en fin, todo esto me hace pensar que en caso de guerra yo sería un traidor. que no se entere el mundo, pero yo soy mexicano por casualidad y no por convicción. y espero, sobre todo, que no se vayan a enterar otros mexicanos, porque siempre se ponen muy locos y son muy sensibles.

los tipos duros y los blandos

lo que tengo es envidia.
el señor sabina hace las cosas tan bien y yo tan mal...
no soy de ésos a los que hasta el fracaso se les ve despampanante. a mí se me ven las ojeras y la desilusión. como ganas de causar lástima.
sabina y otros son tipos duros. reciben los chingadazos y le dan una calada al cigarrillo. continúan bebiéndose su whisky como si nada hubiera pasado. juegan con el hielo inclinando el vaso a la izquierda y a la derecha, o en círculos. escriben sin rencor, con nostalgia, con una sonrisa que en mí se vería amarga. y a pesar de todo lo que les ocurre, el mundo es el que está mal, la física no cuadra y las matemáticas son idiotas porque no pueden explicar que dos más dos no sean cuatro.
no puedo sacarme de la cabeza el consejo que me dieron un día: que necesito reírme del mundo y burlarme de lo idiota que se ve. pero cómo me voy a reír. ¿y si el mundo se enoja? ¿y si luego ya no me quiere hablar? y es que yo nunca sé cuándo detenerme. siempre se me pasa la mano. así me ha ocurrido con un montón de gente que ahora no me interesa, pero que en algún momento me importó. y es que, coño, esa maldita idea de que la acción está en los extremos es la que me ha echado a perder todo. ahora ya no distingo entre los extremos y otras medidas. hasta los tipos duros y los románticos se moderan, pero a mí no me sale nada bien. lo mejor será quedarme con mi personalidad, aunque envidie la que tienen esos tipos duros, como sabina, hasta casi rabiar.
después de todo, yo he corrido con algo de suerte. salud, rockdrigo.